martes, 3 de junio de 2014

Las 5 cosas mas molestas del Mundial

Como muchos sabrán, en los próximo días se estará disputando la vigésima edición de la Copa Mundial de Fútbol, vamos a decir mejor FIFA World Cup para parecer mas sofisticado. Evento deportivo que despierta todo tipo de pasiones en las masas. En esta ocacion en Brasil.

Ahora bien, es indispensable dejar en claro que no todo es fiesta, jolgorio y hacer sonar la cornetita con un gorrito puesto en la cabeza como un idiota. Con todo la euforia de dicho evento vienen también ciertos factores que a la gente que tal vez no sea tan adepta a este deporte puede resultarle algo molesto. Y de hecho para la gente que tiene empatía con el fútbol también hay cosas que le pueden llegar a importunar. Como por ejemplo la gente falsa, que hasta la llegada del mundial no ven un misero partido pero durante durante el desarrollo del certamen ven uno o dos partidos y ya creen que pueden ser críticos de fútbol diciendo "este no sirve," "lo tiene que sacar a este," "lo tiene que poner al otro." Mismo grupo de gente que por lo general en esos días desarrolla un fuerte sentimiento de patriotismo, cuando antes era muchisimo menor o incluso inexistente. Pero ojo, solo aparece cada cuatro años.

A continuación voy a dejar lo que para mi son "Las cinco cosas mas molestas del Mundial de Fútbol según W" en una lista totalmente aleatoria sin ningún tipo de orden.

1- El subnormal que cada vez que la selección hace un gol, toma como misión personal la tarea de escribir "goooooooooooool" en toda red social que tenga a su disposicion. Por gente como vos hay personas que no se interesan en el fútbol y se mantienen lo mas alejado posible con el temor de terminar igual de subnormal que vos.

2- Las publicidades en exceso estúpidas y manipuladoras. Coca- cola y Quilmes por poner algunos ejemplos. Cursis hasta mas no poder y sin el menor sentido del ridiculo. "Sponsor oficial de la selección, ahora compranos una coca o no sos un verdadero hincha." Lo bueno es que una vez eliminada la selección, se cual sea el país, las publicidades desaparecen.

3- El australopithecus que porque le decís que no te interesa el mundial ni miras los partidos te dice espantado "Ay pero no queres a tu país vos?." Lo dicen con la total certeza de que el mundial, ojo el de fútbol nomas, nos define como país. Claro, porque todas las relaciones exteriores se van a desarrollar en base a como quedemos en el mundial. Si hubiese un mundial de pelotudos, vos serias el capítan de nuestra selección seguro.

4- El sentimiento de patriotismo y solidaridad que se le despierta a mucha gente exclusivamente para estas fechas y cada cuatro años. Salen a la calle vestidos con los colores de su selección de pies a cabeza, porque claro los están reperesentando a ellos y hay que demostrar que están orgullosos de ser argentino. Aunque el 25 de mayo ni en pedo los vas a ver llevando una escarapela y si les preguntas por San Martín te dicen que es el de la linea Mitre que va desde Retiro a Jose Leon Suarez.

5- El forro que nunca falta para preguntar "sabes como va el partido?" No importa que no este jugando Argentina, tampoco le importa al flaco la posibilidad latente de que a vos pueda chuparte un huevo como va el partido. Pero ahí estan ellos "sabes como va el partido?" así estes en el trabajo, en la calle o en el baño del McDonlas meando sujetandote la poronga cuando escuchas TOC-TOC "no sabes como va el partido?"
Así este jugando Chipre y Malasia. "No sabes como va el partido?"


Podes dejarme tu opinión en el box de comentarios(porque yo la re valoro), darle like, compartirlo o lo que se te de la gana. Es todo por ahora. Seguiremos reportando.



Spoiler: Argentina pierde.



lunes, 7 de abril de 2014

Los mensajes de cumpleaños te arruinan el cumpleaños

Una vez al año tanto vos, como yo, o como cualquier otro individuo sobre la  fas de la tierra se encuentra con ese momento donde por solo un día es el centro de atención de su entorno social: el cumpleaños.

Esa fecha personal donde celebras un año más de tu llegada a este mundo, un año mas de vida y un año en donde te volvés mas viejo. Y no te creas la mentira esa de "con cada año no me vuelvo más viejo sino más sabio." No, las pelotas, con cada año que pasa te volvés mas viejo y pasados los 25 años se vuelve mucho mas notorio; no dejes de dudar en ningún momento que con cada año que pasa se va a sumando una letra mas en el epitafio de tu lapida.

¿Pero es esta la parte cruda y difícil de digerir de tu cumpleaños? ¿Saber que cuanto más años cumplís menos te quedan en este host server que denominamos vida? No, para nada, mas tarde o mas temprano todos nos vamos a morir y cuanto mas rápido asimiles este hecho mejor.

¿Entonces cual es la parte difícil de llevar del cumpleaños? Fácil: los molestos, fastidiosos, soporíferos, engorrosos, absorbentes, cursis y del orto mensajes de cumpleaños.

Pero no me mal interpreten. No digo que este mal que tus amigos(implicando que los tengas) te saluden por tu cumpleaños. Todo lo contrario, está bien que tus amigos de verdad y familiares te deseen un feliz día. Significa que les importas y que, ya sea grande o pequeño, vos ocupas un lugar en su vida.

El problema para mí en estos mensajes radica cuando gente de afuera, gente a la que viste cinco o seis veces en tu vida, gente con la que no tenes una relación mas que laboral o mantenes el mínimo contacto, también se dedica a mandarte mensajes de cumpleaños. Es más algunos realmente se creen ser amigo tuyo solo porque hace 20 o 30 años compartieron un salón de clase.

¿Quien tiene la culpa de esto? La tecnología, obviamente. Con esto del Twitter, Facebook, y Whatsapp, que, vale aclarar, son herramientas gratuítas, razón por la cual es más factible que te manden un mensaje ya que no tienen que gastar un peso. 
Tal vez si te los cruzás en la calle no se toman la molestia de saludarte y se hacen los que no te ven, pero el día de tu cumpleaños con ver una alerta arriba que dice que cumplís años enseguida te mandan un mensaje que en el 99.99% de los casos es "Feliz cumple" o "Feliz cumpleeeeeeeee," porque al margen de que alguna vez compartieron un aula o estuvieron en una misma fiesta no tienen ni la mas remota idea de quien sos. El otro 0,01% es lo mismo solo que le agregan una broma totalmente carente de gracia como "jejeje compartí torta" pero ellos piensan que es re gracioso, viste.

Entonces después el pobre infelíz se encuentra con 50 o 70 mensajes en donde rescatando diez como mucho, todos son del mismo tipo que les acabo de mencionar. Entonces, ¿como mierda respondés un mensaje totalmente hueco, estúpido y carente de cualquier emoción? Respondiendo de la misma forma: "Gracias Lu", "Gracias Fer", "Gracias Pablo", "Gracias Maru", agregando alguna pelotudez o alguna promesa de verse en algún momento no muy lejano pero que vos honestamente esperás que no llegue núnca.

Tampoco estoy a favor de los mensajes pegajosos y cursis del tipo melodramático como por ejemplo "Loco espero de todo corazón que pases un muy feliz cumpleaños, sabés que para mi sos un hermano y voy a estar en todas siempre, te quiero amigo". ¿Que le pasa al goma este? ¿Porque no viene y me come la boca también? ¿Te viste todas las temporadas de Chiquititas y ahora me venís a joder a mi con tu desborde sentimental? No, no, andá a lavarte las bolas. Trolo.

Lo que mas me intriga es que motiva a la gente que solo te saluda con un "Feliz cumpleeeee," si esa va a ser la única vez en el año que te va a hablar. ¿Para que se toma la molestia? Se me ocurren dos motivos y los dos son malos. O son falsos o tienen menos materia gris que un mono al que le practicaron una lobotomia cerebral. Pero si hay algo para rescatar de todo esto, es el hecho de que ninguno de estos individuos te llamaría por teléfono ni se aparecería en tu casa porque en el fondo vos les chupas un huevo. En cambio un amigo de verdad si te llamaría o te escribiría un mensaje dando a entender que realmente te estima sin la necesidad de recurrir a la cursilería barata.

Yo mismo no tengo ningún problema en llamar por teléfono o dejar un mensaje a esas personas a las que me acostumbre y le tengo como una especie de afecto ya sean amigos o familiares. Y si planeás hacer una reunión con motivo de festejo por tu cumpleaños y me invitás, para mí va a ser un honor asistír. Pero no voy a tener el descaro de saludarte y desearte un "felíz" cumpleaños si a mí me da lo mismo si mañana te pisa un camión. 

-Boludo ayer murió Juan.
-Bajon, ¿che querés ir al cine hoy? tengo 2 x 1."
-¡Eso ni se pregunta!

 Es por eso que descontando los mensajes y las reuniones con tus amigos de verdad, el resto de los mensajes de cumpleaños te arruínan el cumpleaños.

Si el articulo les gustó o piensan que les puede resultar útil, compartanlo y en una de esas las garrapatas con ínfulas de amigo que tienen por ahí, captan la idea y se dejan de molestar.



martes, 18 de marzo de 2014

El otro día me pedi una pizza

Antes de empezar con el relato me gustaría contestar algunas posibles preguntas que los lectores pudiesen llegar a tener:

W, cuando escribís por primera vez tras empezar un nuevo año siempre nos comentas cuales son tus primeras impresiones y nos relatas alguna anécdota de verano. ¿Este año no nos vas a contar nada?
No.

¿Porque?
Porque no se me da la gana.

En fin, como dice el titulo de la entrada el otro día me pedí una pizza.

W estaba ya a media cuadra de la entrada de su casa; deslizo su mano izquierda al bolsillo de su mochila que llevaba colgando sobre su hombro derecho para sacar las llaves cuando en ese momento nota que la puerta de entrada se abre iluminando apenas la vereda con la luz del pasillo.
Eso no suponía nada para W, igual iba a tener que sacar las llaves para abrir la puerta de arriba pero le llamo la atención la figura que salio del interior, oscura, casi una sombra debido a los arboles que obstruían la poca luz que pudiese llegar a haber a las diez y media de la noche.
Igual W no necesitaba de ningún tipo de iluminacion para saber de quien se trataba. El pelotudo del vecino pensó, que salio a sacar la basura. Tal vez el tipo no era malo pero era un pelotudo certificado, cada vez que W tenia la desgracia de cruzarselo en el pasillo o en la escalera siempre salia con algún problema de su cochina casa. Algunas goteras que le hacían en el departamento, los vidrios de la puerta que seria buena idea cambiarlos, conseguir algunas plantas para decorar el pasillo. Un pelotudo.
Tristemente para W el encuentro era inevitable.
"Hola, buenas noches" saludo su vecina con esa tediosa y gastada sonrisa de pelotudo que lo caracterizaba.
"Hola" respondió W, en todo este tiempo no se había tomado la molestia de aprenderse su nombre, no le interesaba, para el era simplemente el peluto del vecino.
Ya le había dado la espalda, encaminándose hacia las escaleras que lo llevarian hasta su hogar cuando nuevamente vuelve a oír esa vocecita esta vez desde atrás. "Disculpa tendrías un minuto?"
Asi tenga uno o mil gastarlos en vos seria como tirar tiempo restante de mi vida al inodoro, pensó W pero si había algo que no se podía negar era que el era un muy buen vecino siempre con infita predisposición.
"Decime," respondió con un tono que cualquier persona podría haber interpetado como 'si no me queda otra' pero este tipo no porque era un pelotudo, no había mas vuelta que darle al asunto.
"Hoy limpie la escalera, cuando subas fíjate que esta todo limpio," dijo su vecino y se quedo mirando esperando...que?
"Que bien," dijo el, no se le ocurría que otra cosa podía contestar. Giro sobre si mismo dio dos pasos pensando que todo había acabado pero nuevamente: "O sea los tres pisos y el pasillo, fijate como quedo".
Vagamente W recorrió el oscuro pasillo con la mirada, no le pareció ni mucho mas sucio ni mucho mas limpio de como se veía siempre. Estaba normal.
Era viernes el llegaba de trabajar y ya estaba realmente cansado, "Se lo ve limpio, pero decime a donde queres llegar?"
El vecino quedo estupefacto, como si se esperara cualquier otra respuesta menos esa. "Bueno creo nos podríamos organizar para que entre todos la escalera este limpia, esto lo limpie yo solo hoy."
W empezaba a perder la paciencia, bueno no es que se pudiese decir que tuviera mucha. "Ya me quedo bastante claro que limpieaste la escalera, en este minuto que paso lo dijiste tres veces. Queres que te demos una guirnalda con un ramo de flores? Yo también he hecho cosas acá y no pedí que me coronen reina del barrio."
"No es para que te pongas así, esto te lo digo como buen vecino," dijo su vecino defensivamente como si W le hubiese tirado un espadazo y el lo hubiese bloqueado con un escudo. Su rostro empezaba a palidecer.
"Al menos para mi el concepto de 'buen vecino' no implica que yo siendo vecino le rompa las pelotas o otro vecino. Vos dispone de tu tiempo como quieras, yo voy a hacer lo mismo con el mio. Buenas noches." Sin esperar respuesta alguna giro y subió por las escaleras.
Al llegar a su departamento no se encontró con nadie para recibirlo mas que una soledad absoluta. Bueno estaba el gato de la casa acurrucado en una silla en el comedor, pero el y W jamas habían sido amigos así que era lo mismo que si no hubiese nadie.
Que milagro, pensó el. Se dirigió a su cuarto, prendió la luz y arrojo su mochila en la cama, que cayó apenas haciendo un ruido casi completamente silenciado por el colchón.
Que iba a hacer ahora? Algo tenian que comer ya eran casi las once de la noche. Parece una buena noche para pedir una pizzita, se dijo, aunque eso tendría sus contras, iba a tener que usar el telefono para llamar y eso no le gustaba, nunca le habia gustado hablar por telefono pero la situacion bien ameritaba el sacrificio.
Tomo el telefono, marco y al otro lado de la linea alguien atendió, "Pizzeria el Trebol buenas noches, en que puedo ayudarle?"
Queria saber si tenían repuestos para cilindros neumaticos boludo, para que alguien llamaría a una pizzeria si no era para pedir pizza o empanadas. Lo estúpida que podía llegar a ser la especie humana lo enfermaba, pero de todas formas se las arreglo para contestar, "Quería pedir una grande de muzzarella."
"Bien, una grande de muzzarella entonces."
"Ok, mira..." ahora venia la parte difícil sabia el, "No se si sos vos el que me atiende siempre pero yo siempre pido que me descuenten las aceitunas porque la verdad es que no las uso."
Hubo una pausa, como si no hubiese llegado a escuchar, "Como dice?"
"Que si no seria posible que me descontaran las aceitunas porque no me gustan, antes siempre me las descontaban," repitió el y tras esto volvió a haber una pausa seguido de un sonido claramente distinguible, "Puede ser que se esten riendo?"
"No, no para nada," contesto su interlocutor con una voz que indicaba en efecto que se estaba riendo y recién ahora estaba recuperando la compostura o la suficiente como para responder, "Mire, acabo de preguntar pero me dicen que eso no es posible. Son ochenta y cinco pesos."
"Bueno no hay drama," respondió resignado y dolido, antes si le habían descontado las aceitunas y si la memoria no le fallaba el orégano también. El tenia orégano en su casa.
Dio su dirección, corto el teléfono y se dedico a esperar su pizza que según le habían dicho tardaria entre veinte y treinta minutos. Una pizza con aceitunas que el no quería pero las iba a tener que pagar igual. Burgueses de mierda.
No tenia otra cosa que hacer mas que esperar, fue hasta su computadora que ya se encontraba prendida, reviso su correo electrónico, entro a su Facebook, vio un par de videos en Youtube, las cosas comunes que uno hace en la PC para matar el tiempo bah.
Entonces sono el timbre.
Había preparado la plata justa, ochenta y cinco pesos, pero tenia que dejar algo de propina, el no era ningún tacaño. Busco y busco pero no encontró ninguna moneda de veinticinco centavos y no podia seguir haciendo esperar al de la pizza, porque su pizza se iba a enfirar. Que se cague, decidio finalmente y bajo.
Pago con lo justo y subió, de propina podria haberle dado las aceitunas, penso despues.
La pizza estaba bien caliente, la podía sentir atraves de la caja que sostenía cuidadosamente con la palma de su mano.
Al abrir el olor a masa y queso recién salido del horno lo invadió y no tardo en hacersele agua la boca. Pero ahí estaban ellas también, las aceitunas. Les dirigió una mirada cargada de odio, desprecio y asco, y una por una las saco.
Tomo una porción, la mas grande de todas según le pareció a el, y con el dedo índice le fue acomodando hacia la superficie, los chorros de queso que iban colgando a los costados. Dio un mordisco y la masa caliente crujió entre sus dientes mientras la muzzarella de deshacía en su boca. Si, le había costado ochenta y cinco pesos y había pagado unas aceitunas que no quería pero al menos la pizza y la soledad estaban con el, y lo estaba disfrutando.
Fue en ese momento cuando oyó el ruido de la puerta de afuera que se abría.
La vida me odia.